SHOPPING ADVISOR: UNA TARDE EN EL MBFW: CIBELESPACIO + AGÁTHA RUIZ DE LA PRADA

El pasado miércoles tuve la oportunidad de asistir a mi primer, y espero no último, desfile de Mercedes-Benz Fashion Week, invitada por un organismo cuyo nombre prefiero omitir para no darles el gusto de proporcionales publicidad gratuita ya que mis entradas no aparecieron en toda la tarde ni vidas ni muertas pese a estar inscrita en la lista de invitados, lo que supuso una perdida de tiempo y un quebradero de cabeza para todo el equipo de azafatas y comunicación de la MBFW, que en todo momento hicieron lo posible por subsanar un error que no les correspondía.

Por ello antes de contaros mi crónica sobre la experiencia me gustaría darle las gracias especialmente a dos personas: a Ana, una de las afatas de la MBFW, que me dispensó un trato y una atención exquisitas y removió Roma con Santiago hasta que consiguió arreglar el problema de mi entrada y a Silvia Espinola, encargada de la comunicación de Ágatha Ruiz de la Prada, que para compensar el error, insisto del cual ellos no eran responsables, me ofreció un sitio de excepción en el desfile junto al Embajador de Francia.

Y una vez superado el problema, por fin, conseguí acceder al Cibelespacio (no confundir con el ciberespacio) y pasearme entre los stans de los diferentes patrocinadores y admirar las interesantes propuestas de los diseñadores independientes participantes en EGO. La verdad es que me sorprendió el gran número de “fashionistas” que corrían de allá para acá en pos del regalo gratuito y todas aquellas jóvenes y no tan jóvenes, que casi siempre en grupo, se habían vestido con sus conjuntos de domingo (por no decir directamente de fiesta) para disfrutar del evento (y ya de paso, si se terciaba, ser fichadas por algún agente). Sí, si me sorprendió, mucho el tipo de gente que encontré, porque sinceramente esperaba encontrar un público más profesional.

Stand de Cosmopólitan en el que podíamos hacernos una foto en este
maravilloso sidecar a lo Audrey Hepburn en "Vacaciones en Roma"

Stand de Slan de Cabras en el que podíamos apagar nuestra sed y
degustar sus deliciosas aguas de sabores.

Stand de Loreal en el que podíamos hacernos la manicura, recibir
consejos de maquillaje y desfilar por una pasarela cual top models
internacionales.

Stand de Vogue en el que podíamos picar algo mientra hacíamos nuestra
propia camiseta personalizada.

Stand de Glamour en que podíamos llevarnos una "shopping bag"
personalizada para nosotros en directo por un gafitero.

Stand de Yodona en el que podíamos recibir consejos de maquillaje e
inmortalizar el resultado con una foto de recuerdo.

Coronas de Burguer King, patrocinador de la pasarela
de nuevos talentos, personalizadas por los diseñadores
de EGO.

Showroom de EGO.

Sala de prensa, reservada para unos pocos afortunados.

Y después de varios paseos de reconocimiento, algunas revistas gratuitas y una compra en EGO que más adelante os enseñaré por fin a la hora acordada accedí a la Sala Mercedes. Fue un momento mágico sólo comparable a cuando de pequeña llegué a Disneyland! Era increíble, estar allí tan cerca de la pasarela rodeada de famosos y periodistas!

Sinceramente, el desfile de Agatha Ruiz de la Prada era uno de los que más me podía interesar pues siempre me ha gustado su ropa y de hecho la he elegido como regalo en bastantes ocasiones para mis seres queridos.

La diseñadora española presentó un desfile divertido, alegre y colorista animado por el ritmo de la música Disco Inferno que nos animaba a saltar a la pasarela para mover las caderas.

Y como siempre sus diseños fueron "in crescendo" comenzando por los más ponibles hasta terminar por los más espectaculares y arriesgados. Prendas que jamas en "total look" pero si combinadas con otras dan un toque de color y alegría a cualquier estilismo.

Como siempre pudimos ver los elementos característicos de la diseñadora como el binomio rosa-naranja y los corazones aplicados a numerosas prendas y complementos, desde transformados en calienta manos hasta bordados en los más diversos tejidos.